Carta de amor.

Hoy te extrañé, te pensé más que otros días. A mí vinieron las sensaciones de nuestros encuentros y me pregunté por qué la insistencia de traerte conmigo a todos lados. No tuve que analizar mucho para saber que ese pensamiento recurrente es provocado por el amor que ahora se manifiesta para tí a través de todo mi ser.

Perdóname si no te suelto pero esque... estoy enamorada. En serio, perdona mi necedad de aferrarme a tí a través del pensamiento, de este necio pensamiento controlado por mi no menos necio corazón. Ahora ambos te pertenecen. Por favor, déjame ser cursi... esque estoy enamorada. Tercos, no paran de mencionarte.

Te extraño. Quiero verte pronto, abrazarte. Ven, quiero que me beses. Acaríciame. Quiero probar tu saliva en la piel de mis labios o mi cuerpo. Necesito humedecerme con tu humedad. TE AMO. Quiero hacerme agua entre tus brazos, sentir tu calor junto al mío, mirar de cerca tus ojos cerrados cuando me besas. Ven para cobijarte de la tempestad. Te necesito hablándome quedo al oído para que sólo tú y yo nos enteremos.

Vuelve pronto mi amor.